En este episodio especial del canal ElShowDeAlex.TV, Alex conversa con Adrián, creador del canal Tianguis de Crítica, sobre un tema fascinante y profundo: ¿por qué nos gusta lo que nos gusta? A través de una charla auténtica y llena de introspección, exploran cómo se forman nuestros gustos, qué los condiciona y qué papel juegan la cultura, las experiencias, la biología y el inconsciente en nuestras preferencias personales.
Los gustos no son casualidad
Adrián y Alex comienzan cuestionando la idea de que nuestros gustos son simplemente caprichos o elecciones libres. En realidad, muchas de nuestras preferencias están condicionadas por múltiples factores: la infancia, los vínculos afectivos, los traumas, la sociedad en la que crecimos y los mensajes que recibimos constantemente. Lo que creemos que elegimos puede ser, en muchos casos, una respuesta automática a estímulos repetidos o a experiencias tempranas que marcaron nuestra percepción. Comprender esta programación es clave para empezar a distinguir lo que realmente nace de nosotros y lo que simplemente fue adoptado.
La cultura como molde invisible
Durante la conversación, se destaca cómo la cultura moldea sutilmente nuestros gustos. Desde la música que escuchamos hasta la comida que preferimos, hay un entramado social que define lo aceptable, lo admirable, lo deseable. En este punto, Alex y Adrián coinciden en que cuestionar la cultura dominante es esencial para recuperar nuestra autonomía interior. No todo lo que nos gusta nos pertenece. Muchas veces, esos gustos responden a una necesidad de pertenencia o validación. Desaprender se vuelve un acto de valentía espiritual.
El inconsciente y las elecciones invisibles
Uno de los momentos más reveladores del episodio es cuando se aborda el papel del inconsciente. ¿Por qué repetimos patrones en nuestras relaciones? ¿Por qué nos atraen ciertos tipos de personas o situaciones? Detrás de cada elección hay una historia no contada que se repite sin que lo notemos. Alex señala que hacer consciente lo inconsciente es un proceso liberador. Cuando entendemos el origen de nuestros gustos más arraigados, podemos decidir si queremos seguir alimentándolos o transformarlos en algo que refleje quién somos hoy.
Gustos adquiridos o naturales
Surge también el debate sobre si nuestros gustos son innatos o adquiridos. Mientras algunos defienden que nacemos con ciertas inclinaciones, Adrián plantea que todo es aprendido y condicionado. Ambos coinciden en que no hay una verdad absoluta, pero que lo importante es tener la libertad de cuestionar. ¿Qué me gusta porque realmente me conecta? ¿Y qué me gusta porque siempre me dijeron que debía gustarme? En ese ejercicio de sinceridad profunda, se encuentra un camino hacia la autenticidad.
El placer como brújula interior
A lo largo del episodio, se propone una nueva forma de ver el gusto: como una brújula que nos guía hacia lo que nos expande. Cuando algo nos gusta genuinamente, cuando lo disfrutamos sin culpa ni presión externa, estamos alineados con nuestra esencia. Alex enfatiza que el placer no debe ser negado ni reprimido, sino escuchado como un lenguaje del alma. En una sociedad que constantemente etiqueta nuestros deseos como buenos o malos, aprender a confiar en el cuerpo, en la emoción y en la intuición es un acto revolucionario.
De la superficialidad a la profundidad
Lo más interesante del diálogo es cómo trasciende lo superficial. Hablar de gustos no es hablar de caprichos; es hablar de identidad. Cada preferencia revela una historia, una necesidad, un anhelo profundo. Al explorar por qué nos gusta lo que nos gusta, nos damos permiso de vernos más allá de los roles, más allá de las máscaras. Adrián y Alex abren un espacio de honestidad y vulnerabilidad que invita al espectador a hacer lo mismo consigo mismo: observarse sin juicio, con compasión, y con deseo genuino de conocerse.
Los gustos no son casualidad
Adrián y Alex comienzan cuestionando la idea de que nuestros gustos son simplemente caprichos o elecciones libres. En realidad, muchas de nuestras preferencias están condicionadas por múltiples factores: la infancia, los vínculos afectivos, los traumas, la sociedad en la que crecimos y los mensajes que recibimos constantemente. Lo que creemos que elegimos puede ser, en muchos casos, una respuesta automática a estímulos repetidos o a experiencias tempranas que marcaron nuestra percepción. Comprender esta programación es clave para empezar a distinguir lo que realmente nace de nosotros y lo que simplemente fue adoptado.
La cultura como molde invisible
Durante la conversación, se destaca cómo la cultura moldea sutilmente nuestros gustos. Desde la música que escuchamos hasta la comida que preferimos, hay un entramado social que define lo aceptable, lo admirable, lo deseable. En este punto, Alex y Adrián coinciden en que cuestionar la cultura dominante es esencial para recuperar nuestra autonomía interior. No todo lo que nos gusta nos pertenece. Muchas veces, esos gustos responden a una necesidad de pertenencia o validación. Desaprender se vuelve un acto de valentía espiritual.
Te invitamos a ver el episodio completo Invitado Adrián de México – Porque nos gusta lo que nos gusta en el canal ElShowDeAlex.TV. Esta conversación profunda puede ayudarte a entenderte mejor, a cuestionar tus elecciones y a vivir con más autenticidad.
